Liliana Crociatti en el Cementerio de La Recoleta

Esta es la bóveda de Liliana Crociatti de Szazak. Es de estilo neogótico y en ella descansa una joven que murió a los 25 años en Suiza en 1970.

Un alud cayó sobre el hotel donde se alojaba con su marido; él se salvó. Los padres de Liliana levantaron una bóveda en el cementerio en cuyo exterior se destaca esta imagen en bronce. A su lado, a instancias de su madre, para que ella "no esté sola", se ubicó la figura del perro que tuvo a los quince años llamado Sabú.

La escultura es del argentino Wilfredo Viladrich, quien aconsejó el uso del bronce en vez de mármol, ya que es más perdurable. En una pared frontal hay un poema en italiano escrito por el padre de Liliana.